Hablan los Rectores 1 UNAM

Hablan los Rectores

Rector de la UNAM

DISCURSO DEL RECTOR JUAN RAMÓN DE LA FUENTE AL RECIBIR EL DOCTORADO HONORIS CAUSA POR LA UNIVERSIDAD DE ALCALÁ 2005

Colegas Universitarios:

Los ciudadanos del siglo XXI y, sobre todo, los jóvenes, aspiran tanto al desarrollo como a la justicia. ¿Cuál es entonces el papel de las universidades en ese proceso y en este contexto? Si lo fundamental para la política, la interna de cada país y la internacional que nos vincula a todos, es dar respuestas y construir alternativas a los problemas de la sociedad, entonces, hoy más que nunca, la política debe centrar su mirada en la educación. Porque educar es mucho más que proporcionar información y transmitir contenidos epistemológicos a nuestros estudiantes. Educar es formar personalidades únicas e irrepetibles, constituir a los sujetos éticos que habrán de asimilar y transformar el orden cultural y social de su tiempo; educar es forjar seres humanos libres, sensibles, autónomos, críticos y creativos, comprometidos con la sociedad y aptos para el ejercicio consciente de la democracia y la defensa responsable de los derechos humanos.
Frente al creciente poder de los procesos mercantiles y el principio de lucro desmedido, cuya presencia se percibe detrás de muchas de las grandes decisiones que hoy nos afectan, la educación preserva lo que no puede ser comprado ni vendido; es decir, lo mejor del ser humano.
Si la globalización, impulsada por los más poderosos, aspira a la consolidación de una red de libre comercio y tecnologías sofisticadas que propician exclusiones cada vez mayores, las universidades aspiramos a construir una red más trascendente y generosa: la red del conocimiento. Una red incluyente y solidaria sustentada en el saber.
Las universidades iberoamericanas hemos dado algunos pasos firmes en esa dirección. Como muestra, el proyecto UNIVERSIA. Pero necesitamos que éste y otras instancias como el Consejo Universitario Iberoamericano de Posgrado, sigan enriqueciéndose y contribuyan de manera más decidida a la construcción de un nuevo iberoamericanismo, dirigido específicamente al desarrollo de nuestras sociedades y genuinamente interesado en el espíritu de nuestras gentes, en su cultura. Requerimos de un Espacio Común de Educación Superior Iberoamericano.
Señoras, señores:En este recinto donde la leyenda y la realidad, la imaginación y las ideas han aportado tanto al mundo, recibo, con orgullo, el laudo que ustedes hoy me conceden. Lo asumo, en el mejor espíritu que nos legó el Quijote: el que sostiene que el conocimiento debe aplicarse en beneficio de la humanidad. Así lo explicaba el propio ingenioso Hidalgo en el Castillo del Caballero del Verde Gabán: "La caballería andante es una ciencia que encierra en sí todas o las más ciencias del mundo", pues quien profesa este oficio, además de cumplir con claras virtudes morales, como la valentía, la honestidad y la caridad, "ha de ser jurisperito y saber las leyes de la justicia"; ha de ser teólogo, médico y herbolario; ha de "saber las matemáticas, porque a cada paso se le ofrecerá tener necesidad de ellas"; pero sobre todo, el caballero andante, al igual que todo universitario, ha de ser defensor de la verdad y constructor del saber para difundirlo y compartirlo en beneficio de nuestros pueblos.